El hombre desde sus inicios utiliza su habilidad pensante y analítica para transformar física y químicamente los elementos que requiere de la naturaleza, para sobrevivir y mejorar su estatus. Esto ha dado lugar a un sinfín de productos y servicios de interés social, lo que se evidencia en los sistemas de calefacción, sector alimentario, energético (combustibles) y más. Sin embargo, algunos comprometen al medio ambiente, siendo necesario técnicas como la destrucción papel.

Las gomas, polímeros, metales, cartón y vidrio, son otros de los materiales que actualmente están impulsados para su reciclaje. Ahora bien, en lo que respecta al papel, por provenir de la celulosa y fibra de árboles, está en juego tanto la vida de estos, así como la de los seres que requieren del oxígeno que ellos ofrecen, siendo entonces importante la destrucción para que al ser reprocesado se aproveche buena parte de su esencia.

Está comprobado, en base a los resultados de las industrias de manufactura de papel, que el producto obtenido del reciclaje, cumple a cabalidad con los estándares de calidad determinados. Por tal razón, han surgido empresas dedicadas a esta sustancial tarea, ofreciendo como ventajas disminución de costes de materia prima (más en el caso de las sintéticas) e impacto ambiental.

Cabe destacar, que dicha actividad se alimenta de documentos con mucho tiempo de almacenamiento, los cuales ya no tienen valor significativo. Esto se localiza fácilmente en las escuelas, universidades, oficinas, entidades bancarias, empresas y más. En función de la información contenida se determina un grado de confidencialidad, lo que debe ser garantizado (certificados) por quienes harán la tarea, de lo contrario, se corre el riesgo de recibir fuertes sanciones legales de existir alguna violación.

Hoy día, la sociedad está en una era tecnológica, donde mucha información es registrada digitalmente, bien sea en memorias, llaves USB, ordenadores, DVD, CD o discos duro. Sin embargo, las estadísticas reflejan que el uso del papel no será erradicado, ya que es un excelente respaldo, por lo que ambos sistemas de almacenamiento son necesarios.

Por otro lado, los documentos en papel de carácter legal, son más auténticos, entre ellos: títulos de propiedad, coches, testamentos, permisos e identificación. De allí, que el reciclaje de este material retoma constantemente mayor importancia y se estima un largo tiempo de vigencia.